El coaching funciona porque te sientes enfocado de inmediato en lo más importante para ti.
Tus necesidades, tus valores, tus creencias, tus pasiones, tus sueños, tu vida, tu verdadero yo, se potencian con la motivación y logras resultados satisfactorios de forma rápida.
Confiando en que las circunstancias son oportunidades energéticas para nuestra evolución, el coaching lo aprovecha como una invitación al despertar. Crea un cambio positivo. Se experimenta la alquimia de la transformación.
La cantidad de buena suerte depende de tu voluntad para actuar. Tu puedes crear la vida que deseas.
El coaching permite sacar el máximo partido a tus habilidades, hace que salga lo mejor de tu interior.
El coach te acompaña aplicando sus herramientas para permitirte ampliar la visión y actuar respetando tu voluntad y capacidades.
Puedes ir de la mano de un coach cuando:
Para saber si deseas un coach deberías preguntarte
¿Diseño yo mi futuro o los otros lo hacen por mí?
El coaching es un dialogo enfocado a conseguir objetivos de futuro próximo.
Los temas a tratar pueden ser tanto personales como profesionales.
Cualquier conversación enfocada en conseguir tu meta y que dependa de tu actitud es aceptada, dentro de los parámetros del respeto y la ética.
Puedes poner tus objetivos en cambios, nuevos proyectos, miedos y sentimientos, salud, gestión de tiempo, de relaciones. Puedes abrir puertas a la motivación, a la transformación y al crecimiento personal o profesional.
Apostar por un coach puede ser el primer paso para cambiar la estrategía empresarial en momentos de crisis.
El coaching transforma y todo lo que haces con tu coach es una inversión de futuro.
El coaching en los negocios surgió de la necesidad de un cambio en el liderazgo para adaptarse a las nuevas organizaciones más planas y menos jerárquicas.
En Set Coaching damos prioridad a la persona como engranaje principal en el sistema de la empresa. La actitud es clave y un trabajador motivado contagia acción. Un equipo feliz es sinónimo de éxito en una empresa sana y rentable.
Los resultados son medibles y duraderos en todos los niveles.
El coaching es un proceso enfocado a la acción. De utilidad para iniciar o avanzar proyectos, mejorar la comunicación, plantear y conseguir metas, mejorar el futuro y extraer el potencial individual.
Se procura que dichas acciones repercutan de forma positiva al entorno con una actitud pro-activa. La persona pro-activa es capaz de tomar decisiones, iniciativas, ser responsable de la propia vida con ética. Es capaz de superar las dificultades delante de las circunstancias sin buscar culpables.
El coaching permite vislumbrar un horizonte. Permite poner conciencia de la existencia de múltiples puertas de salida. Favorece la proyección y el crecimiento a partir del autoconocimiento y la motivación realista y consciente.
El coach te lleva a la acción y a asumir decisiones. Debes estar dispuesto a comprometerte e intentar pequeños pasos en el sentido de tus deseos.
El coaching pretende trabajar desde el potencial interno de la persona. Para conseguir el éxito en el objetivo planteado por el coachee (cliente) es imprescindible el auto-análisis.
El coach observa, escucha, cuestiona y guía al cliente. Lo acompaña a la introspección con la ayuda de herramientas como:
Se basa en el código deontológico promulgado por la CTI (The Coaches Training Institute) del que cabe destacar la confidencialidad y el respeto hacia el cliente (coachee).
CTI establece un manual de competencias claves del coaching basado en el código de ética aprobado el 22.01.2005 por ICF (Internacional Coach Federation). Este código se apoya en el artículo 1 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos (ONU 10.12.1948) donde se dice: “Todos los seres humanos nacen libres e iguales en dignidad y derechos”.